Sillas colgantes en interiores y exteriores

Nos encantan las sillas colgantes, ¿a ti también? Buen gusto, sí señor; y es que estos elementos pueden iluminar cualquier espacio aparentemente soso y sin chispa, ya sea se trate de un espacio interior o exterior. Un momento, ¿un espacio interior? Sí, así es, ¿o pensabas que las sillas colgantes eran exclusivas para exteriores? Pues no, estas sillas quedan estupendamente bien en el interior de una casa, casi tanto como lo hacen fuera.

Nos encantan estas sillas ya que pueden adaptarse a la decoración de cada casa sin problemas, pudiendo encontrar en el mercado sillas colgantes vintage, bohemias o más rústicas. Elementos realmente encantadores que nos harán disfrutar de unas horas de lectura llenas de magia. ¿Qué te parece la idea?

Las conocemos por ser una alternativa a las tradicionales hamacas. Sí, las hamacas también tienen su encanto, pero lo cierto es que las sillas colgantes ocupan menos espacio, algo que sin duda siempre viene bien. Además, mientras que las hamacas necesitan soportes laterales, este tipo de sillas puede colocarse en cualquier rincón, pues van sujetas al techo aunque también hay otros modelos con soporte fijo integrado.

En los dormitorios, estas sillas colgantes darán un toque muy interesante. Podemos llenarlas de cojines, siendo así un rincón de relax maravilloso.

Materiales encontramos muchísimos, aunque lo cierto es que las que más gustan suelen ser las que están hechas con fibras naturales como las de mimbre. No obstante, si no te va eso del mimbre, no desesperes, puedes encontrarlas de madera, de tela o de ganchillo. El límite está en tu imaginación.

Si, en el interior nos gustan mucho, pero no podemos negar que si contamos con un bonito patio o jardín, estas sillas colgantes pueden hacer que se transforme en un auténtico paraíso; y es que no hay nada mejor que tumbarse en una de estas sillas mientras disfrutamos del aire fresco y el verde de nuestras plantas.

¿Qué te parecen las sillas colgantes? ¿Te gustaría tener una?