Centros de mesa con sal

No es necesario gastar mucho dinero para impresionar a nuestras visitas. Con poco tiempo, poco presupuesto y un poco de gusto, podremos realizar verdaderos centros  de mesa para esos eventos tan especiales que organizamos en nuestro hogar.

Hoy os enseñamos como hacer un fantástico centro de mesa con tan sólo un jarrón de cristal, sal gruesa y ramas de árbol secas.

Es realmente fácil, pues tan sólo tenemos que llenar jarrón de cristal con la sal y luego clavar las ramas. Aun así, podemos observar que el efecto de su resultado es de lo más elegante, perfecto para una decoración natural, e incluso para aquellos salones minimalistas sin muchos muebles.

Además, tenemos que tener en cuenta que esto puede ser una base de muchísimos centros diferentes. Por ejemplo, podemos añadir tinte o colorante a la sal, haciendo que en vez de verse blanca sea por ejemplo azul. Además, la misma se puede mezclar con otros componentes como pequeñas piedras de río, conchas de mar o incluso piedras de colores.

Si queremos darle un toque más verde, podemos incluir una planta en el centro, quitando o no las ramas. De esta forma tendremos un macetero de sal muy bonito.

Pero además, si nos apetece un centro de flores secas, este recipiente es ideal para poder colocar flores secas en su interior. Eso sí, quizá quede mejor incluirlas en unos pequeños botes de cristal y enterrarlos por la mitad para que queden un poco sumergidos en ese mar de sal.

Aunque esta manualidad se hace con sal, lo cierto es que también podemos elegir azúcar para ello. Un elemento mucho más dulce que prácticamente tendrá el mismo efecto en nuestro improvisado centro de mesa.