Comedores pequeños

Los comedores pequeños pueden ser un quebradero de cabeza a la hora de amueblar. Lo cierto es que ante unas dimensiones reducidas, lo mejor será evaluar las posibilidades y ser honestos con nosotros mismos. Evidentemente no podremos poner grandes mesas de cristal o madera con un sinfín de sillas de gran tamaño. Aun así, siempre hay soluciones.

Podemos, por ejemplo, optar por mesas más pequeñas, para dos, pero que en un momento dado pueden extenderse y convertirse en auténticas mesas ceremoniales. Para ello, sería ideal acompañarla con dos sillas y contar con sillas plegables para cuando tengamos que abrirla.

Otra opción para comedores pequeños son esas mesas que cuentan con un punto de apoyo en la pared. Por norma general es más fácil aprovechar el espacio si nos valemos de la pared como si fuera una pata más de la mesa. De esta manera ganaremos unos centímetros para que la mesa sea un poco más larga.

Las mesas redondas son ideales para intentar ahorrar un poco de espacio. Además, admiten bastantes sillas a su alrededor. Podemos intentar poner cada una de un estilo para añadir un plus decorativo a la composición.

Estas mesas redondas pueden colocarse en las habitaciones más pequeñas. Si además añadimos sillas cómodas, estaremos creando un rincón de lo más confortable, con bastante encanto.

Sin duda alguna, una de las opciones más interesantes es unificar la idea de mesa pequeña, ya sea redonda o cuadrada, con un par de sillas alrededor y un banco. El banco nos permite aprovechar un trozo de pared que de otra forma se perdería, ideal si no queremos ocupar más espacio con sillas innecesarias.

Como veis, no contar con espacio no implica que tengamos que optar por una solución decorativa con poco encanto. Tan sólo tenemos que observar y pensar con que estilo queremos vestir esta estancia de la casa.