Reforma integral para una amante de las antigüedades
En el corazón de Barcelona, un antiguo piso de 160 metros cuadrados ha sido completamente transformado por Luzio Studio en un hogar contemporáneo y acogedor. Este proyecto, diseñado para una amante de las antigüedades, combina la esencia del pasado con la funcionalidad moderna, logrando un equilibrio perfecto entre lo clásico y lo contemporáneo.
Un hogar renovado para el siglo XXI
La renovación de esta vivienda es un fiel testimonio de cómo los elementos clásicos pueden integrarse en un diseño moderno sin perder su esencia.
Luzio Studio ha trabajado meticulosamente para transformar esta vivienda en un espacio funcional y estéticamente agradable, adaptando cada rincón a las necesidades y gustos de la propietaria.
Un proyecto de transformación total
El edificio neoclásico de 1948, aunque carecía de elementos clásicos destacados, se ha convertido en un escenario perfecto para la combinación de antigüedades con decoraciones modernas.
El estudio replanteó completamente los espacios, modificando tabiques e incorporando molduras y carpintería características de la época.
El objetivo era integrar la extensa colección de antigüedades de la propietaria en una decoración fresca y moderna, logrando un equilibrio armonioso entre el pasado y el presente.
Elementos clásicos y contemporáneos
Para satisfacer las peticiones decorativas de la clienta, se crearon ambientes teatrales a través de la iluminación, se añadieron detalles industriales y toques de color, y se diseñó un rincón con chimenea.
Las puertas correderas y batientes de aluminio negro separan distintas áreas de la casa, creando un contraste con la carpintería de madera, las antigüedades y las molduras. Este contraste suaviza el ambiente clásico, dándole un toque moderno y contemporáneo.
La iluminación juega un papel crucial en este proyecto. Se utilizaron focos cuadrados discretos y lámparas de apoyo para resaltar rincones específicos, obras de arte y mobiliario.
Además, se empleó iluminación indirecta en molduras y estanterías para personalizar cada espacio, creando así un ambiente acogedor y a la vez sofisticado.
Zona de día: espacios abiertos y cálidos
La zona de día de esta vivienda ha sido diseñada para ser un espacio abierto y acogedor, donde cada detalle ha sido cuidadosamente seleccionado para combinar funcionalidad y estética.
Desde el recibidor hasta la sala de estar, cada rincón cuenta una historia de transformación y renovación.
Recibidor
El recibidor se destaca por un mural pintado que oculta un aseo de cortesía tras una puerta enrasada.
Aquí se integran piezas clásicas de la colección de la propietaria, como un canapé de estilo Luis XV retapizado en tela de rayas blanco y negro, una mesa auxiliar y un espejo convexo con marco moldurado en negro y dorado.
Una gran rama de encina seca oculta los radiadores y enmarca la puerta corredera de cristal que conduce a la zona de noche.
El recibidor no es solo una entrada a la casa, sino una introducción al estilo y la elegancia que se encuentran en el resto de la vivienda.
La combinación de elementos clásicos y modernos crea una atmósfera acogedora y sofisticada desde el primer momento.
Cocina: detalles clásicos y acabados contemporáneos
La cocina, aunque cuenta con mobiliario y acabados contemporáneos, incluye detalles clásicos como cuadros vintage, papel pintado floral y una campana extractora empotrada.
Los muebles de cocina en color topo con perfiles en negro crean una base minimalista que resalta los pequeños elementos clásicos y los toques de color.
La cocina es el corazón funcional del hogar, donde cada detalle ha sido diseñado para ofrecer la máxima eficiencia y estilo.
Las lámparas y apliques con pantalla metálica en el mismo color burdeos que el estampado del papel pintado añaden un toque de color y elegancia, mientras que la madera de la estantería de roble y el suelo laminado aportan calidez.
Comedor y sala de estar
El comedor, conectado con la sala de estar y la cocina mediante puertas correderas de estilo industrial, destaca por sus piezas clásicas como una mesa isabelina extensible de roble natural decapado, sillas antiguas restauradas y una escultura con pedestal de hierro natural.
Las obras de arte contemporáneo y las lámparas de estilo moderno complementan la decoración, mientras que las ramas de encina seca aportan frescura al ambiente.
La sala de estar se ha transformado en un espacio abierto al eliminar el arco que separaba el comedor y el salón.
Una moldura de yeso recorre todo el salón, creando un cortinero iluminado con luces LED que añade un toque contemporáneo.
Las cortinas de tejido tupido en tonos claros aportan calidez y confort, creando un ambiente acogedor y relajante.
Chimenea: el corazón del hogar
La chimenea, una de las peticiones más importantes de la propietaria, se convirtió en la pieza central de la zona de día.
Es un modelo eléctrico con un marco antiguo de piedra rosada mate, tallada a mano. Su ubicación estratégica permite que sea visible desde la entrada, el comedor y la sala de estar.
A cada lado de la chimenea, se colocaron librerías de roble natural hechas a medida.
La chimenea no solo añade un toque de calidez y confort, sino que también actúa como un punto focal alrededor del cual se organiza todo el mobiliario y la decoración.
Es un símbolo del hogar y un elemento que aporta personalidad y carácter al espacio.
Zona de noche: elegancia y funcionalidad
La zona de noche ha sido diseñada para ofrecer el máximo confort y privacidad. Cada detalle ha sido cuidadosamente seleccionado para crear un ambiente relajante y elegante, donde la funcionalidad y la estética se combinan a la perfección.
En esta zona nos encontramos con una suite con vestidor y baño integrados, un dormitorio para invitados y un segundo vestidor.
Suite principal
El dormitorio principal se amplió uniendo dos habitaciones y un baño, creando un acceso directo desde el vestidor al cuarto de baño.
Es un verdadero oasis de tranquilidad, donde los textiles de lino en tonos piedra y naturales crean un ambiente relajante.
La butaca antigua restaurada, junto con la mesita de noche y el escritorio, son piezas de la colección de antigüedades de la propietaria, añadiendo un toque personal y único.
Baño de la suite
En el baño de la suite se utilizaron materiales en tonos neutros para crear un ambiente acogedor y contemporáneo. El porcelánico en tono crema de la zona de aguas y la madera del pavimento y el mueble volado contrastan con el blanco de las paredes, la encimera y los sanitarios.
Un espejo antiguo con marco clásico en negro y dorado sobre la encimera mantiene la coherencia con el toque clásico del resto de la vivienda.
El baño de la suite es un ejemplo perfecto de cómo combinar elementos modernos y clásicos para crear un espacio funcional y elegante.
Cada detalle ha sido cuidadosamente seleccionado para ofrecer el máximo confort y estilo.
Esperamos que este proyecto te haya gustado tanto como a nosotros. Como se puede ver, el resultado es un hogar acogedor y funcional que refleja el equilibrio entre el pasado y el presente, con una colección de antigüedades como protagonista.
¡Gracias por leernos!
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Más información: luzio.studio
Fotografías: Montse Garriga©
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